Los corredores marítimos ecológicos son rutas de transporte marítimo diseñadas para dar prioridad al uso de tecnologías y combustibles de emisiones bajas o nulas. Estos corredores se establecen a través de asociaciones público-privadas para avanzar en los objetivos de descarbonización, garantizando al mismo tiempo la viabilidad comercial de toda la cadena de valor del transporte marítimo de emisiones cero. 

Las iniciativas de corredores verdes se centran principalmente en acelerar la adopción de combustibles emergentes e "inmaduros". El gas natural licuado (GNL) se desmarca de esta categoría por su consolidada condición. He aquí otras tres razones por las que el GNL no en la combinación de combustibles de los corredores de transporte marítimo ecológico:

1. El GNL no es un combustible de bajas o nulas emisiones. Desde el punto de vista del ciclo de vida, es decir, teniendo en cuenta las emisiones en todas las etapas de la vida útil, el GNL tiene un impacto insignificante en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. Para descarbonizar el sector del transporte marítimo en consonancia con el objetivo de 1,5 ºC del Acuerdo de París, la industria necesita ahora una profunda reducción de las emisiones y una rápida eliminación progresiva de los combustibles fósiles.
2. El GNL no contribuye a los objetivos de descarbonización. El metano, principal componente del GNL, es un potente gas de efecto invernadero con una vida útil de 12 años en la atmósfera. Aunque no permanece mucho tiempo en la atmósfera, el metano absorbe 84 veces más energía que el CO2. Según el IPCC, para hacer frente a la emergencia climática es urgente atajar las emisiones de metano.
3. El GNL es un activo inmovilizado. Debido al aumento de la normativa climática, la creciente oposición a la dependencia de los combustibles fósiles y los controles sobre las emisiones de metano, la infraestructura de GNL perderá valor y se convertirá en un pasivo. El GNL provocará un bloqueo de la tecnología y la infraestructura, lo que dificultará la viabilidad de las soluciones de emisiones cero y su adopción generalizada.

Los corredores marítimos ecológicos son demostraciones a gran escala de la viabilidad de nuevos combustibles y tecnologías. El GNL ya está en explotación comercial, por lo que no entra en este ámbito. En lugar de confiar en los "combustibles de transición" para ganar más tiempo, deberíamos centrarnos en alcanzar objetivos ambiciosos y desafiantes para superar las barreras existentes. Esto nos permitirá ir más allá de la noción de lo que es "factible" y trabajar para alcanzar nuestras ambiciones moonshot. El uso de GNL proporciona una falsa sensación de confianza y puede obstaculizar el progreso de los corredores de transporte marítimo ecológico al impedir la consecución de objetivos más ambiciosos.