"El papel del GNL en la transición hacia un transporte marítimo con bajas o nulas emisiones de carbono" fue publicado por el Banco Mundial en abril de 2021. El informe trata de identificar el papel del gas natural licuado (GNL) como combustible de búnker en los años 2020-2050, y si el GNL podría contribuir a los objetivos fijados por la Estrategia Inicial de la Organización Marítima Internacional (OMI) sobre gases de efecto invernadero (GEI) y la transición del sector hacia un transporte marítimo con bajas y nulas emisiones de carbono. 

El informe concluye: 

• Es probable que el papel del GNL como combustible de búnker sea limitado, con un rápido descenso de la demanda en 2030. 
• Deben evitarse las políticas públicas que apoyen el GNL como combustible de búnker. En su lugar, hay que centrarse en políticas y acciones que regulen las emisiones de metano durante el ciclo de vida y aceleren la investigación, el desarrollo y el despliegue de combustibles con cero emisiones de carbono para enviar una señal clara de los riesgos del GNL como combustible. 
• Los resultados del GNL en materia de emisiones de gases de efecto invernadero y las inversiones realizadas hacen poco atractiva una implantación sustancial desde una perspectiva medioambiental y económica.
• El papel del GNL en el transporte marítimo se ve amenazado por varios factores, entre ellos el riesgo de un bloqueo tecnológico con una trayectoria de emisiones de GEI incompatible con el objetivo climático de la OMI para 2050.
• Al considerar el GNL como combustible de búnker, el sector naviero debe evaluar el clima interno y externo, el panorama político y la presión social. 

Lea el informe para saber más.